La salud está en los detalles, en pequeños cambios como por ejemplo en esa salsa que le echas a la ensalada y hace que no sea saludable, o en ese arroz refinado que se carga tu plato de buena proteína y vegetales.
![La salud está en los detalles](https://static.wixstatic.com/media/8cd9ed_28653dc80abe4f8fb9c69e73024fb589~mv2.jpg/v1/fill/w_740,h_740,al_c,q_85,usm_0.66_1.00_0.01,enc_auto/8cd9ed_28653dc80abe4f8fb9c69e73024fb589~mv2.jpg)
No hace falta renunciar a la repostería, a la paella o a la pizza. No hace falta hacer cambios drásticos, gastarse más dinero en productos Bio o empezar a morirse de hambre. Lo que debemos mirar bien es el origen del alimento, o de qué está hecha esa preparación que nos vamos a comer.
Porque la salud está en los detalles
Cuando hablamos de pan blanco, estamos hablando de un pan elaborado con harina refinada, que significa que han cogido el trigo y han procesado el grano, quitándole 2 de las 3 partes que lo constituyen, y dejando solo la parte menos interesante, que es la que contiene todos los azúcares, que al venir ahora sin la fibra, la proteína y las grasas que le han quitado en las otras 2 partes, nos va a causar un alto impacto (pico de azúcar) en nuestro organismo, aparte de aportarnos pocos o ningún nutriente.
En cambio, cualquier cereal integral (en este caso el pan), está elaborado con el grano entero, sin refinar, de ahí la palabra integral (viene íntegro).
Un cereal tiene tres partes: el salvado, el germen y el endospermo o grano. Cuando lo refinamos le quitamos el salvado y el germen; eso conlleva quitarle la fibra, y gran parte de sus minerales y vitaminas. A un cereal blanco le queda únicamente almidón y algo de proteína.
Usar el grano entero implica
- Consumir más nutrientes comiendo menos cantidad del mismo alimento.
- Saciarnos más y durante más tiempo.
- Elevar menos el azúcar en sangre.
- Reducir, por tanto, la probabilidad de almacenar grasa y engordar.
- Evitar el riesgo de enfermedades asociadas al consumo de refinados.
Entonces, aparte de aportarnos muchos más nutrientes, va a tener un menor impacto negativo en nuestro organismo.
Lo que hay que cambiar es
- El azúcar de la repostería por un dulce natural, como dátiles o coco rallado.
- El arroz refinado de la paella por arroz integral.
- La harina refinada de la pizza por harina integral o avena; y el contenido como el bacon y el jamón york por verduras, soja o huevo.
Recuerda: La salud está en los detalles.