
«Hay que comer de todo»
Lo he dicho en muchos artículos, pero lo repito de nuevo: que seamos seres biológicamente omnívoros no quiere decir que tengamos que comer de todo por fuerza mayor, sino que podemos comer y extraer nutrientes de casi todo (dentro de lo razonable).
Publicidad alimentaria y productos superfluos 📺🍬
Aprovechándose de este mito, los fabricantes de la industria alimentaria enfocan los anuncios publicitarios en productos alimentarios que, en su mayoría, son productos superfluos y de poco interés nutricional.
Del mismo modo, también es especialmente común escuchar a gran parte del personal sanitario abogar por un consumo moderado, en el que lo que importa principalmente son las cantidades y calorías que se toman (de nuevo, no miro a nadie, Doctores No y Cuñadietistas). Pero, ¿cuánto es moderado? ¿Cuándo deja de ser moderado? Nadie lo sabe, porque es algo subjetivo.
La realidad del consumo moderado 🥤🍪
El caso es que, a quien sea que le preguntemos, todo el mundo bebe “ocasionalmente”, y respecto al consumo de dulces, todo el mundo los toma “de vez en cuando”, sin abusar.
— El Nutri Mortis: ¿No es así, Adultniño?
— Adultniño: Tal cuál. ¡Y no entiendo por qué sigo engordando! ¡Parece que engordo solamente con mirar la comida!
— El Nutri Mortis: Claro que sí, “champion”.
Y es que nadie quiere asumir que tiene un comportamiento irresponsable dentro de su entorno. Al final, termina el día y te vas a la cama pensando que lo has hecho genial, pero nada más lejos de la realidad.
Conclusión: Comer de todo lo que hay que comer 🍏🥦
Por tanto, no, no hay que comer de todo, hay que terminar las frases:
«Hay que comer de todo lo que hay que comer.»